Los objetivos SMART son una guía valiosa para su negocio. A menudo oímos hablar de la definición de objetivos corporativos, tal vez basados en la misión y, sobre todo, en la visión.
Como todos sabemos, el acto de establecer metas abarca todos los aspectos de la vida: desde la forma en que maneja una relación hasta un plan de trabajo, todo se reduce a definir un punto final y la necesidad de establecer prioridades.
Pero, ¿cómo sabes si tus objetivos comerciales (pero también personales) están realmente bien definidos? En esta guía explicaremos el significado de las siglas SMART y cuáles son las reglas de oro a respetar para una gestión de objetivos realmente eficaz.
Consejos útiles para definir un objetivo SMART
Ponerse una meta significa definir una meta a alcanzar: pero ¿cómo entender si estamos avanzando en la dirección correcta y, sobre todo, si las metas a perseguir son realmente útiles?
¿Qué son los objetivos SMART?
Los objetivos SMART son una idea relativamente nueva. Comenzó a escucharse en 1981, cuando George T. Doran, consultor y ex director de planificación empresarial de Washington Water Power Company, publicó un artículo titulado "Hay una forma INTELIGENTE de escribir las metas y objetivos de la gestión".
En este documento, Doran introduce el acrónimo SMART como criterio para incentivar las posibilidades de éxito en la consecución de un objetivo. El significado de las siglas SMART es:
• S = Específico • M = medible • A = Alcanzable • R = Relevante • T = basado en el tiempo (Temporizzabile)
La adopción de medidas mediante el establecimiento de objetivos para su negocio es fundamental para su éxito. Deténgase por un segundo: ¿qué es lo que realmente quiere lograr?
Cuanto más específica sea su descripción, mayores serán las posibilidades de que obtenga exactamente eso.
Simplificando al máximo el concepto, el establecimiento de objetivos SMART es exactamente el paso que te lleva de decir "quiero ser millonario" a "quiero ganar 60.000 € al mes durante los próximos diez años creando un software innovador para la gestión en línea". órdenes".
Ahora veamos en detalle qué significa la gestión de objetivos SMART describiendo cada fase de este acrónimo.
Acrónimo SMART: significado y ejemplos prácticos
Si desea comprender cómo organizar el trabajo de las personas y planificar las operaciones, aquí le mostramos cómo integrar los objetivos SMART dentro de una empresa, paso a paso.
S = Específico
La aplicación del método SMART comienza con la definición de un objetivo específico. Al establecer una meta, ser específico y extremadamente claro sobre lo que quiere lograr es clave.
Mejorar los resultados comerciales, fortalecer la fuerza del equipo y aumentar la cantidad de cursos de capacitación internos son objetivos demasiado vagos, porque no explican cuándo, cómo y por qué realizar estas actividades es útil para usted.
Para ayudarlo a comprender cómo pensar sobre un objetivo específico, tomamos prestada la estructura de un modelo periodístico, el de las " 5W
". Tu objetivo es específico si respondes estas 6 preguntas:
M = medible
Para ser definido SMART, un objetivo debe ser Medible. ¿Qué métricas tienes a tu disposición para saber si realmente has conseguido el objetivo?
Al tener métricas de referencia, te será más fácil medir el progreso en el campo. Si el proyecto es a largo plazo y supone el paso de varios meses, siempre se pueden establecer metas intermedias para medir el avance real de la obra.
A = Alcanzable
Su objetivo debe ser alcanzable y alcanzable teniendo en cuenta los recursos que tiene.
En esta etapa, debe pensar detenidamente sobre cómo lograr el objetivo y si tiene las herramientas y habilidades necesarias. Si cree que no tiene las herramientas y habilidades necesarias, piense en lo que podría necesitar para adquirirlas.
R = Relevante
Los objetivos SMART deben ser Relevantes, es decir, útiles en términos de costo/oportunidad para su empresa.
Cuando hablamos de un objetivo relevante, nos referimos a algo que vale la pena perseguir y que está bien integrado en el contexto de objetivos comerciales más amplios.
Hablando de ejemplos de objetivos SMART realmente relevantes, digamos que quieres lanzar un producto al mercado para consumidores finales. Tus colaboradores pueden tener todos los recursos necesarios, pero si tu empresa sigue un modelo B2B que no implica la implicación del consumidor final, tu objetivo sería de poca relevancia para el desarrollo del negocio.
T = basado en el tiempo (Temporizzabile)
Para que un objetivo sea realmente SMART, es necesario establecer unos plazos y un tiempo concreto para su realización.
Decir “quiero conseguir grandes volúmenes de facturación” no es lo mismo que fijarse un objetivo SMART: ¿a qué volúmenes te refieres y en cuánto tiempo crees que llegarás a tu objetivo?
Más bien, podrías decir "Quiero tener un aumento del 25% en mi facturación en el período del 1 al 31 de enero, pasando de 10.000 € a 12.500 €". Recuerde siempre establecer plazos para lograr sus objetivos SMART, y si el objetivo tarda varios meses en alcanzarse, establezca hitos.