El índice tuvo un incremento de 524 mil personas en el segundo mes del año.
El número de personas ocupadas en México registró un incremento de 524 mil 661 durante febrero del presente año, su mayor incremento desde octubre del 2021, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOEN), la población ocupada (PO) pasó de 55.5 a 56.1 millones de personas en el segundo mes del año, respecto a enero.
Del total de ocupados, 38 millones de personas (67.7 por ciento) operaron como trabajadores subordinados y remunerados ocupando una plaza o puesto de trabajo, 155 mil de personas más en su comparación mensual.
Además, 12.8 millones (22.8 por ciento) trabajaron de manera independiente o por su cuenta sin contratar empleados, un incremento de 235 mil. Por su parte, 3 millones o el 5.4 por ciento fueron patrones o empleadores, cifra que se elevó en 249 mil.
Por sector económico, el terciario registró el mayor número de personas ocupadas con 863 mil 540 en febrero, impulsado por los servicios sociales con 358 mil 935 personas y por los servicios profesionales, financieros y corporativos con 277 mil 141 ocupados.
Con esto, la Población Económicamente Activa (PEA) aumentó en 565 mil 589 personas para situarse en 58.24 millones.
Durante febrero, se contabilizaron un total de 2.18 millones de personas en desocupación, la tasa de desempleo abierto para el mes de febrero se situó en 3.74 por ciento, ligeramente por encima de la observada en enero, cuando se ubicó en los 3.71 por ciento.
En febrero de 2022, la población ocupada en la informalidad laboral fue de 30.6 millones de personas y la Tasa de Informalidad Laboral fue de 54.6 por ciento de la población ocupada, 0.24 puntos porcentuales menor a la del mes anterior.
Luis Foncerrada, asesor económico de American Chamber México, propone cobrar un impuesto por cantidad de alcohol en bebidas y no por su precio.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador puede recaudar hasta 25 mil millones de pesos adicionales por año si cobra el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) de las bebidas alcohólicas bajo el sistema ad-quantum (por cantidad de alcohol contenida en el producto).
“La propuesta (al gobierno de AMLO) consiste en que cambie el sistema utilizado para cobrar el IEPS a bebidas con contenido alcohólico, es decir pasar de un sistema ad-valorem (o valor del producto o bebida) a un sistema ad-quantum para gravar el litro de alcohol puro contenido en las bebidas”, dice Luis Foncerrada Pascal, asesor económico de American Chamber México.
El exdirector del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) y Anel Rodríguez Quinto, maestra en Alta Dirección de Empresas por la Universidad Anáhuac Mayab, propusieron al gobierno federal establecer una cuota única aplicable al contenido de alcohol en cada bebida, como tequila, aguardiente, vodka y otras.
“Los beneficios (de un impuesto cobrado por la cantidad de alcohol) son incrementar la recaudación de 15 mil a 25 mil millones de pesos, adicionalmente se suma la reducción de evasión e ilegalidad de 8 mil millones”, dice el estudio Modernización del IEPS a bebidas alcohólicas: salud y progresividad.
El consumo excesivo de bebidas alcohólicas como tequila, mezcal, aguardiente, vodka, entre otras más, genera adicción y daña severamente la salud de las personas.
Por esta razón, en un gran número de países se imponen impuestos a estos productos adicionales a los que corresponden a las ventas en general: “Las formas específicas en que se aplican estos gravámenes son diferentes, sin embargo, todas parten de dos principios básicos: ad-valorem —sistema en el cual se grava sobre el valor del producto—, que consiste en aplicar una cuota según el precio; ad-quantum, que toma en consideración el contenido alcohólico en vez del precio de mercado”, comenta Foncerrada Pascal.
En el caso de México, el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) vigente para las bebidas alcohólicas parte de un criterio de tipo ad-valorem.
“Con el propósito de reducir los riesgos a la salud propiciados por el alto consumo de bebidas con contenido alcohólico y con la finalidad de incrementar la recaudación impositiva, hoy en día se ha abierto la discusión respecto a modificar el criterio por el cual se gravan las bebidas alcohólicas, pasando de un sistema ad-valorem a un sistema ad-quantum”.
En México exista un fácil acceso a las bebidas con alta graduación alcohólica, es decir, a aquellas que tienen un contenido de alcohol que va desde los 20 ̊ hasta los 55 ̊, a un precio muy bajo, declaran los economistas.
“Esto pone a disposición de las personas jóvenes, de bajos recursos y adictos, bebidas alcohólicas de baja calidad y altamente peligrosas para la salud”, añade.
Un ejemplo de esto es el aguardiente, cuya botella de 750 ml con 28 ̊ de contenido alcohólico, se puede conseguir por 45 pesos, así como otro caso más grave son bebidas de 960 ml que se pueden adquirir por menos de 20 pesos, explica Luis Foncerrada Pascal.
“Si se fijara la cuota en 140 pesos por litro de alcohol puro, el aguardiente, por ejemplo, que tiene en promedio 28 ̊ de contenido alcohólico en una botella de 750 ml, el impuesto a pagar sería de 29.40 pesos”, detalla el exdirector del CEESP.
“Si el precio antes de impuestos de esta bebida es en promedio de 25.35 pesos, en total se estaría pagando alrededor de 63.52 pesos con IVA incluido”, precisa Foncerrada Pascal.
Un impuesto cobrado por la cantidad de alcohol contenida en el tequila, aguardiente, mezcal y otros cumple el objetivo de desincentivar el consumo nocivo de alcohol, ya que grava los grados de alcohol puro contenidos en una bebida, que finalmente aumentan los riesgos en la salud de las personas, manifiestan los investigadores de la Universidad Anáhuac Mayab.
El hecho de gravar el contenido de alcohol en bebidas también puede desalentar la fabricación de bebidas con mayor contenido etílico y promovería la elaboración de productos de mejor calidad, así como maximizar el potencial de reducción de las cargas sociales y de salud causadas por el consumo de alcohol.
Con la llegada de la pandemia por COVID-19, la compañía se vio obligada a ampliar sus ofertas, desde comidas en restaurantes hasta entrega de comestibles y artículos de conveniencia.
Uber Technologies está llevando sus ambiciones en los servicios de entrega más allá de la comida y hacia el comercio minorista, buscando “superar” a Amazon dijo el director ejecutivo Dara Khosrowshahi.
En una conferencia de la industria, Khosrowshahi comparó las ofertas de Uber con las de la empresa canadiense de comercio electrónico Shopify, que ayuda a los comerciantes a configurar y operar sus propios escaparates digitales.
“Estamos pensando esencialmente en un Shopify local: podemos ayudarlo a impulsar su comercio local en línea, en tanto que la relevancia de la plataforma y la audiencia de Uber es innegable en el mundo”, dijo Khosrowshahi, hablando en el marco de la conferencia ShopTalk en Las Vegas.
La empresa con sede en San Francisco, que se fundó como un negocio de transporte compartido, se vio obligada a dar un giro al tiempo que la pandemia destruía la demanda de viajes y explotaba la de los servicios de entrega. Desde entonces, Uber ha ampliado sus ofertas, desde comidas en restaurantes hasta entrega de comestibles y artículos de conveniencia.
Khosrowshahi dijo que el negocio de entregas podría llegar a ser más grande que los viajes, incluso cuando la unidad de movilidad vuelva a los niveles previos a la pandemia. Uber agregó 120 mil comerciantes que no son restaurantes a su plataforma en el último año. Su negocio de entrega en su conjunto fue rentable en el cuarto trimestre de 2021, impulsado por su unidad principal de entrega de alimentos, Uber Eats.
A pesar del aumento de la inflación, Khosrowshahi dijo que Uber no ha visto un impacto material en el negocio. Sin embargo, su ejército de trabajadores temporales ha visto cómo sus ganancias se reducían debido a los altos precios de la gasolina, lo que llevó a Uber a aplicar un recargo por combustible a los viajes y las entregas.
En una entrevista con Bloomberg Technology, Khosrowshahi dijo que la compañía tomará medidas adicionales si los precios de la gasolina se mantienen altos en mayo cuando expire el recargo por combustible, pero no llegó a comprometerse a reducir la comisión de Uber por viajes y pedidos de Eats.“Vamos a analizar la situación”, dijo Khosrowshahi, y si no cambia, la compañía considerará extender el recargo”, destacó.
El escrutinio cada vez más intenso en torno a las ganancias de los conductores se produce cuando Uber, su rival Lyft y otras compañías independientes enfrentan una posible medida electoral en Massachusetts en noviembre, similar a la Proposición 22 de California, que permitía clasificar a los conductores como contratistas independientes, pero luego fue anulada.
El CEO de Uber dijo que habló con el secretario del Departamento de Trabajo, Marty Walsh, el año pasado, y que Walsh “realmente quiere aprender sobre los beneficios del trabajo por encargo y algunos de los problemas con el trabajo por encargo”.