El Cyber Security Manager, o Gerente de Seguridad de la Información, es una figura profesional de reciente creación. La sociedad actual se caracteriza por una digitalización de actividades y procesos en constante crecimiento.

La evolución de la tecnología y su irrupción en nuestras vidas (basta pensar en la gran difusión de dispositivos constantemente conectados a la web) también ha traído consigo una serie de problemas relacionados con la difusión indebida de datos, el espionaje electrónico y otros factores que representan una amenaza peligrosa, especialmente para las empresas.

En este contexto nace el concepto de Seguridad Cibernética y por ende la profesión de Gerente de Seguridad Cibernética. Veamos específicamente qué es.

¿Cuáles son tus metas profesionales?

El Responsable de Seguridad Cibernética realiza actividades de prevención, detección y respuesta a ataques y amenazas con origen en la web y encaminadas a la seguridad de las redes informáticas y archivos de datos. El fin último es preservar la confidencialidad e integridad de los sistemas de información de la empresa en la que opera.

¿Cuáles son tus deberes?

Entre las tareas del Gerente de Seguridad Cibernética, las más importantes son el diseño de planes de prevención (a través de intervenciones antivirus y antiespionaje), la intervención en el software y las redes de la empresa si la prevención no es suficiente.

Dependiendo de las actividades principales, el Gerente de Seguridad de TI también debe: • crear antivirus especiales y comprobar su correcto uso por parte de la empresa • realizar pruebas en sistemas y software • identificar y corregir imperfecciones o errores en las aplicaciones • actualizar constantemente

¿Cuáles son las habilidades que debe tener?

El Gerente de Seguridad Cibernética debe tener habilidades diversificadas, especialmente desde un punto de vista técnico-especialista:

• conocimiento jurídico-legal, con referencia a las normas de protección de datos, marcas y patentes empresariales, así como delitos informáticos • Conocimientos informáticos profundos sobre Internet, servidores, redes y periféricos, software, plataformas y comercio electrónico, lenguajes de programación. • conocimiento de sistemas de algoritmos criptográficos y protocolos de autenticación Un gerente de seguridad de TI también debe tener algunas habilidades blandas importantes: • Capacidad para trabajar en equipo • flexibilidad • precisión

Es fundamental que tengas un buen dominio del idioma inglés, naturalmente sin tener en cuenta la jerga informática, cuyo conocimiento es indispensable y evidente.

¿Cuál es la vía de formación más adecuada?

Se requiere que el Gerente de Seguridad Cibernética tenga al menos un título de tres años en Ciencias de la Computación o Ingeniería Informática, que preferiblemente debe seguir una especialización en el campo de la Gestión de la Seguridad (cursos específicos en facultades universitarias italianas de Ciencias de la Computación y profesionales dedicados y los cursos de formación avanzada están cada vez más en auge).

Como ocurre con todas las profesiones del ámbito técnico, la formación no es suficiente sin la experiencia adquirida en el campo y la actualización constante.

¿Dónde trabaja?

El Gerente de Seguridad Cibernética puede trabajar como empleado o como autónomo.

Generalmente opera en multinacionales o medianas-grandes empresas, que disponen de bases de datos y sistemas informáticos con alto riesgo de ataque por parte de “ciberpiratas”. En este caso, a menudo realiza su trabajo como empleado.

Si está empleado en empresas más pequeñas, es probable que ofrezca su propio asesoramiento desde el exterior, como trabajador por cuenta propia o como empleado en empresas de consultoría informática especializadas.

¿Cuánto puede ganar?

Un IT Security Manager puede ganar, en el mercado internacional y para empresas especialmente importantes, incluso cifras que rondan los 80.000 o 100.000 euros al año.

¿Cuáles son las perspectivas de crecimiento profesional?

El principal margen de crecimiento del Gerente de Seguridad Cibernética consiste en el aumento de salario, a través de la captación de nuevos clientes o, para los empleados, a través de la contratación de una empresa de prestigio.