El miedo a la inversión

Muchas personas sienten miedo o dudan al iniciar una inversión en el mercado de valores. En general, una de las preocupaciones más comunes, que también es uno de los obstáculos más grandes para gran parte de los inversionistas, es que tiene miedo a sufrir grandes pérdidas de capital.

Es válido y justificado que los nuevos inversores sientan temor. Inclusive los que ya tienen experiencia en el mercado pueden sentir miedo a la inversión en algunas ocasiones. Sin embargo, el miedo evita una evolución y desarrollo natural.

No obstante, el miedo a invertir puede ser superado si toma las medidas correctas, permitiéndole convertirse en un inversionista con mucho éxito. Te mostramos los principales miedos de inversión y te decimos cómo superarlos

Miedo a la pérdida de dinero

Quizás el miedo a la inversión más común es el perder el capital invertido. Una de las peores pesadillas que puede tener un inversor es ver cómo el mercado colapsa y ver desvanecer ese dinero que tanto costó ganarse. ¿Hay alguna forma de quitarme este miedo? La respuesta es positiva, el miedo humano es una emoción, el objetivo es buscar una forma de transformar esa inversión en una acción sin involucrar emociones, así es posible disminuir el miedo a la pérdida.

Automatice usando un promedio de costos

Una excelente manera de invertir en acciones sin sentir temor es automatizar su inversión, conocido también como promediado de costos. El promedio de costos significa invertir pequeños capitales de forma recular en el mercado de valores por un largo periodo de tiempo. Es un proceso que tiene dos ventajas:

Acaba con el miedo a la inversión, ya que no se invierte un gran capital. No es necesario contar con un gran capital para hacer la inversión, lo que hace que sea bastante asequible para todo tipo de inversores.

Otro beneficio del promedio de costos es que si se da un colapso del mercado, se obtienen una mayor cantidad de acciones por el mismo capital que fue invertido.

Falta de conocimiento

Otro miedo bastante común es que muchos inversionistas no cuentan con el conocimiento necesario referente a las inversiones, por lo que no están seguros de que inversión elegir. Es un miedo bastante lógico, pero también muy fácil de resolver y estar en capacidad de escoger las acciones adecuadas sin necesidad de un analista financiero.

Prepararse para aprender

Ser analista es una habilidad que puede aprenderse con estudio y lectura. No todos los inversores exitosos han tenido conocimientos sobre inversiones o sobre el análisis de acciones. Los conocimientos se adquieren poco a poco, leyendo y utilizando la información para ponerla en práctica. Manténgase actualizado y tómese un tiempo cada día para leer sobre el tema.

Miedo y codicia

Ganar el conocimiento y tener la capacidad de efectuar sólo el 20% del proceso, la fuerza verdadera y la fortaleza que tenga un inversor solo puede probarse viendo su reacción frente a los movimientos del mercado.

En general, los inversores sin experiencia y muchos con experiencia tienen un comportamiento irracional al enfrentarse a los altibajos que tiene el mercado. Cuando se recupera una acción, muchos de los inversores se lanzan a la compra de dicha acción. Es un comportamiento conocido como miedo a perderse.

Una acción que a diario toca un nuevo máximo, da una creencia falsa, pero fuerte de que tiene algo bueno, esto hace que los inversores se lanzan a comprar una acción en caliente, adquiriendo a un precio mayor. Al corregirse el mercado, el precio de la acción se normaliza y los inversores pierden su capital.

No deje que las emociones impulsan su toma de decisiones

Las emociones son propias de cada persona y son una reacción a un evento externo. Dos individuos expuestos a una misma situación seguramente tendrán una reacción diferente. No hay un método para enseñar a reaccionar ante una situación, no existen reglas o fórmulas, es algo que las personas aprenden de sus experiencias.

No importa la habilidad que tenga para seleccionar acciones, si deja que sus emociones impulsen tus decisiones de inversión terminará por tener pocas o ninguna ganancia, inclusive puede perder mucho dinero.

La única forma de tomar habilidad en una toma de decisiones racional es practicarlo, fallar y volver a intentarlo. No es un proceso rápido, pero además puede trabajar la paciencia, y una vez que lo controle podrá dominar sus emociones, sin que estas intervengan en su decisión de invertir.