La comunicación es uno de los mayores desafíos que se encuentran hoy en día. Ya sea en el ámbito empresarial o entre nuestros familiares y amigos, muchas veces tratamos de transmitir un mensaje, a través del habla, la escritura, los gestos, las expresiones, entre otros mecanismos, pero no siempre logramos que nos entiendan verdaderamente.

Por lo tanto, para que tengamos la oportunidad, no solo de transmitir el mensaje que queremos, de manera más eficiente, sino también de entender lo que el otro nos quiere decir en esencia, es fundamental conocer un poco más los elementos que involucran la comunicación, así como su proceso en general.

Principales diferencias del Lenguaje verbal y no verbal

El primero se refiere al lenguaje verbalizado, es decir, aquel que se expresa a través del habla o la escritura, como es el caso de este artículo, por ejemplo, mientras que el segundo se da mediante el uso de signos visuales, como las señales de tránsito, los colores del semáforo, entre otros elementos, que tienen el objetivo de transmitir un mensaje, sin embargo, sin utilizar la verbalización misma para este fin.

Además, cuando hablamos en lenguaje no verbal, también estamos hablando de la imagen que transmite una persona, a través de sus gestos, miradas, actitudes, comportamientos, entre algunos otros elementos, que transmiten un mensaje a quienes la rodean, ya sea de consciente o inconscientemente.

Aquí he compartido contigo solo 12 ejemplos de cada tipo de lenguaje, lo que te da una idea de lo que son ambos, además de darte la posibilidad de saber diferenciarlos en tu día a día. Además de estos, hay varios otros que, con el tiempo, podrás observar y comprender qué es verbal y qué no verbal.

Con respecto al entorno corporativo, comprender cómo funciona cada tipo de lenguaje es fundamental para tener la oportunidad de obtener resultados extraordinarios, tanto en la empresa como en la carrera en su conjunto. Un equipo que converge es aquel que entiende las señales que emite cada profesional, ya sea expresadas en buenas y claras palabras o simplemente en miradas y gestos.

La importancia de la comunicación asertiva

El mensaje idealmente comunicado es aquel que expresa su propósito claramente a la audiencia. Por eso, al construir una estrategia de comunicación, primero es necesario identificar el público objetivo, ya que determinará la forma en que se elaborará el mensaje, el tono del lenguaje y los canales en los que se transmitirá. Si la comunicación fue planificada, las posibilidades de que llegue a la persona adecuada en el momento adecuado aumentan significativamente.

No me refiero a la comunicación interna o externa de una empresa. También estoy escribiendo sobre la forma en que está ejerciendo su comunicabilidad. Reflexiona y analiza si estás utilizando las palabras y los gestos idóneos para cada tipo de persona con la que hablas. Comprueba si el problema fue el diseño o la forma en que lo explicaste.

Otro escenario es cuando su equipo no sigue el resumen que creó. Vale la pena verificar si sus pautas fueron lo suficientemente claras para que la entrega sea verdaderamente asertiva.

Para solucionar este tipo de situación, simplemente tenga una sesión de retroalimentación con las personas involucradas. Trata de entender qué pasó para que tu idea no fuera aprobada o el trabajo no fuera entregado de la mejor manera. Puede ser que el error esté en la planificación, en el proceso o en la propia comunicación. Después de entender cuál fue la falla, es hora de buscar soluciones para que esto no vuelva a suceder.

Si el problema era la forma de comunicarse, haz un ejercicio de autoconocimiento. Investiga cuáles son tus características fuertes en el área de la comunicación y cuáles son las que necesitan un extravío para desarrollarse. Explora desde el momento en que presentas la idea verbalmente, vendes el proyecto por escrito, y también si transmites el concepto correctamente.