No siempre es sencillo contar con los fondos necesarios para que tu negocio sobreviva y salga adelante con éxito, en especial con la economía actual y el pago de impuestos, que puede ser para muchos una pesadilla. No obstante, con una buena preparación y algunos buenos hábitos es posible optimizar los impuestos e invertir en los puntos fuertes de tu empresa.
Reducción del pago de impuestos de tu empresa
No se trata de no pagar los impuestos, se trata de hacer un manejo apropiado que sirva para disminuir los impuestos a pagar. Es importante destacar que, en México, las empresas deben desviar aproximadamente un 30% de sus utilidades anuales para pagar impuestos y otro 10% a los trabajadores, lo que dejaría un 60% para que sea posible hacer nuevas inversiones y producir el capital de trabajo o para que se mantenga el que ya existe.
Estas sencillas estrategias serán de ayuda para la preparación de la declaración fiscal del año:
Conservar los recibos
Tú no serás quien pueda determinar qué deducciones son admisibles Sólo te toca guardar cada uno de los recibos y hacer que un especialista se encargue de su revisión a final de año cuando sea momento de la preparación de los documentos fiscales.
Consigue un contador de confianza para que lleve todo el proceso. Él se encargará de organizar, clasificar y determinar si los recibos de viajes, comidas con clientes, compras de ropa u otras cosas, son gastos admisibles en la deducción de impuestos. No obstante, para ello, es fundamental conservar cada recibo.
Anotar gastos que correspondan a los recibos conservados Debe volverse un hábito anotar cada uno de los datos de los recibos al momento en que llegan. Esto permitirá tener una base, un registro que hará más sencillo organizar los libros contables y hacer los trámites necesarios.
Crear un sistema de archivos
Es bastante común que los recibos terminen regados en todos lados, por lo que es fundamental que cuentes con un sistema de archivo de facturas y que lo utilicen apropiadamente, de manera que cuando llegue el momento de la preparación de los impuestos no dejes nada por fuera y no tengas que estar buscando por todas partes los pequeños papeles.
Separar las finanzas personales de las del negocio Cuando se recién comienza una negocio o empresa, o cuando se trabaja desde casa puede ser difícil hacer una separación de gastos, muchas veces la tentación de pagar los gastos diarios con los fondos de la empresa gana y luego, aunque sean pequeños gastos que parecen insignificantes, terminan pasando factura en los gastos, complicando las posibles deducciones fiscales.
En este sentido, es importante mantener las finanzas personales independientes de las del negocio. Con una cuenta bancaria exclusivamente para cada cosa, será mucho más sencillo llevar el control.
Pagar a tiempo los impuestos y los pagos fraccionados
Cancelar a tiempo te evita tener que pagar montos superiores, por ello es importante hacer cada pequeña cosa que te permita optimizar los puestos que debes pagar y así ahorrar dinero que puede servir para nuevas inversiones. Cancela los pagos fraccionados antes de que llegue la fecha de vencimiento, así evitarás las multas y cargos con intereses.
Usa las deducciones
Es importante que aproveches cada una de las deducciones fiscales que se encuentran disponibles para las pequeñas empresas. Al presentar la declaración de impuestos, debes considerar los gastos que de acuerdo al tipo de negocio pueden ser deducibles, por los gastos por seguros o servicios, entre otros.
En este caso, el contador puede ser de gran ayuda para identificar si se está haciendo un adecuado aprovechamiento de las deducciones de gastos, así como de cualquier transacción que pueda ayudar a optimizar los impuestos.
Esperamos que estas estrategias hayan sido de utilidad, que puedan optimizar tus impuestos sin alejarte de las normativas. Si quieres más información relacionada o sobre otras temáticas, te invitamos a visitar nuestras demás publicaciones.