Cómo adqurir una mentalidad emprendedora

Cuando hablamos de forma mentis nos referimos a una frase latina que literalmente significa “forma/idea/posición de la mente”.

Tener la mentalidad correcta es esencial en el trabajo, pero también en la vida. Adquirir lo que los estadounidenses llaman mentalidad es un rasgo compartido por los mejores jugadores del mundo, ya sean empresarios, líderes, músicos o atletas.

Pero, ¿qué es exactamente lo que fortalece nuestras mentes y cómo se construye una mentalidad ganadora? La verdadera fuerza de la mente proviene de una combinación de conciencia, enfoque y resiliencia. Una mentalidad fuerte es lo que le permite mantenerse enfocado en sus intenciones y objetivos SMART, en lugar de pensamientos negativos. Aquí hay algunos consejos para ayudarlo a desarrollar una mentalidad exitosa.

Consejos para potenciar tu mentalidad

Una mentalidad ganadora, así como el éxito en los negocios, no llueve del cielo: hay que trabajar en uno mismo y adquirir la mentalidad adecuada en el trabajo con el tiempo. Aquí están nuestros consejos para comenzar su camino de crecimiento.

Confía en tu visión

Si eres emprendedor, seguramente habrás trabajado en la visión de tu empresa. Una buena mentalidad emprendedora predice una lealtad absoluta a esta visión. Advertencia: esto no quiere decir que no tengas que tener cierta flexibilidad o que no puedas hacer cambios dentro de tu negocio.

Simplemente significa que debe tener una fe inquebrantable en que sus ideas funcionarán. Si eres el primero en tener fe en tu proyecto, ¿por qué alguien más la tendría?

No confíes (solo) en tu talento

Tener talentos es importante: todos tenemos peculiaridades que nos distinguen de los demás.

Para el gurú del marketing Steve Canal:

“Todos somos buenos en algo, pero una mentalidad ganadora implica que la diferencia entre convertirlo en un pasatiempo o en un negocio es la disciplina y el trabajo que implica. Nunca confíes en tu don o talento”

No confíes (solo) en lo que te hace único: trabaja en ti mismo, identifica tus debilidades y conviértelas en oportunidades para obtener los mejores resultados.

Crea hábitos positivos

Para adquirir la mentalidad del emprendedor exitoso, trabaja tus hábitos. Una vez que haya establecido sus objetivos, actúe sobre los hábitos que rodean su objetivo. Tus hábitos están directamente relacionados con la tasa de agotamiento de tus niveles de motivación, por lo que si no estás acostumbrado a hacer las cosas que son necesarias para lograr tus objetivos, tus niveles de motivación se agotarán más rápidamente.

Tener una buena dosis de valor es muy importante para mantener alta tu motivación. Para Duckworth, la determinación representa la combinación de pasión y perseverancia hacia un único objetivo a largo plazo.

Esta capacidad de recuperarse de la adversidad y mantener la atención es el mayor contribuyente a su éxito, así que nunca la pierda de vista y entrénela evitando la procrastinación y fijándose metas a alcanzar.

Tomar acción

Pensar y planificar son dos elementos clave de la mentalidad emprendedora. Sin embargo, es solo a través de la acción que estos dos elementos cobran vida. Muchos ejecutivos dedican tanto tiempo a analizar su próximo movimiento que se estancan y se vuelven reacios al riesgo.

Como resultado, pierden oportunidades de fallar y aprender de sus errores. Incluso si no está completamente seguro de su decisión, tome el asunto en sus propias manos y reaccione. Disfrutar de la inmovilidad no te ayudará a crecer.

Cuando estés indeciso y tentado a procrastinar o no correr riesgos, finge que ya estás viviendo con las consecuencias de tu decisión. Es posible que descubra que, en el fondo, muchas de sus resistencias pueden superarse fácilmente.

La mentalidad emprendedora no es innata: un camino de crecimiento y desarrollo de habilidades blandas ciertamente puede guiarlo para adquirir la mentalidad correcta. Si quieres mejorar tu rendimiento laboral, echa un vistazo a nuestras rutas de coaching empresarial.