Los mercados financieros, con su característica volatilidad, siempre ofrecen señales claras sobre la percepción de los inversores respecto a la economía y sus expectativas futuras. Esta vez, el peso mexicano en el mercado de futuros de Chicago ha experimentado cambios que merecen un análisis detallado.
El peso mexicano ha visto una reducción de contratos en el CME durante tres semanas consecutivas. Del 11 al 17 de octubre, las posiciones especulativas que apostaban por una apreciación del peso disminuyeron en un 14.45%, representando 37,861 unidades. Si comparamos este dato con las tres semanas anteriores, la caída acumulada se posiciona en 26,653 contratos, es decir, un 41.24%.
No necesariamente. Aunque ha habido una reducción en las posiciones netas, es fundamental reconocer que el sentimiento de los especuladores lleva 33 semanas siendo positivo. Eso sugiere que, a pesar de las recientes tomas de ganancias o reajustes, la visión a largo plazo para el peso es relativamente optimista.
Durante la semana en análisis, el tipo de cambio se apreció en un 0.68%, equivalente a 12.33 centavos, cerrando el viernes con una cotización de 18.1117 unidades por dólar. Es notable mencionar que se ha mantenido por encima de los 18 pesos durante nueve sesiones consecutivas.
Este comportamiento favorable del peso se intensificó el viernes con una apreciación del 0.28%, que representa una variación de 5.15 centavos respecto a la cotización del jueves.
La directora de Análisis Económico en Banco Base, Gabriela Siller, atribuye esta apreciación a la publicación del PIB de Estados Unidos del tercer trimestre, el cual creció a una tasa trimestral anualizada del 4.9%, superando las expectativas del mercado. Dada la relación comercial entre México y Estados Unidos, un crecimiento en el PIB estadounidense suele tener repercusiones positivas en la economía mexicana.
En lo que va del año, el peso mexicano ha logrado mantener una apreciación del 7.16% frente al dólar. Esta cifra es significativa y resalta la resistencia y solidez de la moneda mexicana en el contexto internacional. Es importante esperar la publicación del PIB de México del tercer trimestre para tener una visión más clara del desempeño económico y su posible impacto en el tipo de cambio.
Conclusión
El escenario actual muestra un comportamiento mixto para el peso mexicano: una reducción en contratos en el mercado de futuros, pero una apreciación constante frente al dólar. Es esencial monitorear los indicadores económicos, como el PIB, y mantenerse al tanto de las decisiones y expectativas del mercado para comprender mejor el rumbo que tomará el peso en el futuro próximo.