¿Cómo mejorar la productividad en el trabajo? La mejor manera es, sin duda, tratar de optimizar el tiempo y los recursos disponibles. Veamos algunos consejos para empezar los días con la energía adecuada y ser profesionalmente más productivos.
1. Encuentra una buena actitud mental
La tranquilidad y el relax son fundamentales para dar lo mejor de sí para trabajar y rendir más. Aquí hay algunos consejos para mantenerse relajado y ser más productivo a pesar de la cantidad de trabajo.
• Descansos regulares
Para aumentar la productividad en el trabajo, es muy útil hacer unas pausas de vez en cuando, para recargar energías y seguir con más energía. Pero cuidado con las pérdidas de tiempo, que son contraproducentes ya que podrían obligarte a tener que recuperarte al final del día, con una mente que ya no está fresca.
• Cuidado del cuerpo y relajación
Una condición psicofísica óptima le permite aumentar la productividad en el trabajo. Comer bien y con regularidad, dormir lo suficiente, practicar actividad física gratificante o pasatiempos al final del día, pasar algunas horas de ocio en compañía, son métodos que ayudan a recuperar fuerzas para afrontar otros días de trabajo con tranquilidad.
2. Optimiza tu entorno de trabajo
El primer secreto para aumentar tu productividad en el trabajo sin duda tiene que ver con el entorno en el que desarrollas tu actividad profesional. Específicamente, aquí hay un par de consejos.
• Elimina las distracciones
Para no distraerse, es una buena idea, en primer lugar, no prestar demasiada atención a los correos electrónicos y mensajes privados en el teléfono inteligente y no abrir ventanas de navegación que no sean relevantes para el trabajo en curso.
• Limite la multitarea
La multitarea no siempre es un recurso positivo. La capacidad de cambiar constantemente entre diferentes tareas o participar en múltiples actividades al mismo tiempo puede revelar inconvenientes y conducir a una pérdida de tiempo y concentración.
__3. Mejorar los procesos de trabajo __
Al optimizar sus procesos de trabajo, puede ahorrar tiempo y energía para aumentar su productividad. Veamos algunos trucos que pueden resultar excelentes aliados para lograr este objetivo:
• Llegar a tiempo
Llegar a tiempo a la oficina es un buen hábito que te permite concentrarte en actividades más complejas durante la primera parte del día, cuando tu mente está más fresca.
• Organiza tu trabajo
Debemos partir del supuesto de que el objetivo de una jornada laboral no debe reducirse a realizar tantas actividades como se puedan concentrar en 8 horas. Todo debe hacerse según un orden de prioridad, con método y calidad.
El mejor consejo es centrarse en los objetivos y plazos prioritarios, elaborar una lista de tareas pendientes, que te permita completar las actividades en orden y sin perder tiempo. ¡Nunca dejes nada al azar y la improvisación!
• Sigue cuando puedas
Para aumentar la productividad en el trabajo, un buen consejo es aprovechar los (escasos) momentos en los que se reduce la cantidad de trabajo para continuar y aprovechar los siguientes días de trabajo.
• No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy
La productividad siempre va de la mano de la motivación. Es muy importante identificar el momento del día en el que tienes más energía para realizar las actividades más exigentes, las que menos te gustan.
Posponer es un mal hábito, que no te permite aumentar la productividad en el trabajo y por el contrario ralentiza los procesos y genera una merma en el desempeño profesional. En este sentido, sigue la "regla de los dos minutos" teorizada por el entrenador de vida David Allen: si te lleva menos de dos minutos hacer algo, ¡hazlo ahora!
4. Practica la ociosidad creativa
En tu tiempo libre, opta por practicar actividades que te permitan desconectarte del trabajo y al mismo tiempo potenciar tus habilidades blandas.
Esta “ocio creativa” será fundamental para tu conciliación laboral y personal, y te aportará también importantes ventajas en el trabajo, estimulando el desarrollo de competencias transversales muy útiles para afrontar los procedimientos de trabajo y el día a día en la oficina, en contacto con los compañeros, de la mejor manera posible clientes y proveedores.